Los terapeutas que se han dedicado al estudio de la fascia, han definido este tejido como capas de tejido conectivo con un espesor variable. Clasificando la fascia como superficial y profunda.
La fascia superficial se encuentra inmediatamente debajo de la piel mientras que la fascia profunda se envuelve entre los músculos, nervios y otras estructuras del organismo como los diferentes órganos.
El término miofascial es referido al esqueleto de fibras musculares, organizado como una red interconectada en 3D que rodea y conecta el aparato locomotor.
Podemos comparar este tejido con la piel que cubre los gajos de la naranja, o que vemos cuando abrimos una granada.