Llamamos musculatura isquiotibial, al grupo de músculos de la zona posterior del muslo que participan en el movimiento de la articulación de la rodilla y la cadera.
Toman este nombre de isquiotibiales por su recorrido desde su origen, la tuberosidad ósea isquiática y su inserción a la tibia de semimembranoso y semitendinoso, aunque el bíceps femoral llega hasta la cabeza del peroné. Por eso, algunos anatomistas también denominan a esta región como musculatura isquiosural.
Este grupo muscular lo forman desde la cara interna de la pierna hacia la parte externa:
- Semimembranoso, es el más profundo y el más ancho de los tres.
- Semitendinoso, su inserción es la más inferior de los tres dotándolo de una fuerte palanca para flexionar la rodilla una vez se encuentra parcialmente doblada, alrededor de los 90º.
- Biceps femoral, es el único que se inserta en la parte externa de la rodilla, presenta una cabeza larga que cruza las articulaciones de la cadera y la rodilla y una cabeza corta que solo llega a la rodilla. En su inserción forman un tendón común que llega a la cabeza del peroné y con una pequeña expansión tendinosa, hacia la cara lateral de la tibia.
Están inervados por el nervio ciático.
Todos los músculos isquiotibiales actúan extendiendo la cadera y flexionando la rodilla.
Andando, estos músculos actúan indirectamente para mantener el tronco erguido durante el apoyo de los miembros inferiores, y mientras estamos de pie y flexionamos el tronco controlan el movimiento en el que se produce una flexión de la cadera.