Cada músculo del cuerpo humano tiene una función específica que dependerá de la disposición de sus fibras y de dónde se encuentre.
Primero entendamos los conceptos desde la etimología de las palabras:
- Agonista: Significa que colabora para realizar un movimiento.
- Antagonista: El prefijo an- tiene un significado de negación o "carencia de".
Por lo tanto cada movimiento en el cuerpo humano va a tener su músculo agonista (facilitador) y su antagonista (no facilitador) . Para ello vamos a explicarlo con un ejemplo:
En el movimiento del codo de flexión, al llevarnos la mano hacia el hombro del mismo brazo, sus músculos agonistas principales son el bíceps y el braquial anterior (situados en la parte delantera del brazo), pues son quienes facilitan la acción.
Y ¿Para qué necesitamos un músculo antagonista?
Para controlar el movimiento, y en este caso es el triceps braquial (situado detrás del brazo), pues hace la función contraria y permite controlar la fuerza del movimiento dependiendo de la situación.
En el movimiento del codo de extensión, se invierten los papeles siendo el músculo agonista principal el triceps braquial y los músculos antagonistas controlando el movimiento el bíceps y el braquial anterior.
Ilustrado por: Enrico Petrarolo (CC BY 2.0)